Agosto es sinónimo de fiesta en numerosos pueblos y ciudades de España. Por ejemplo, se celebran las fiestas patronales de Leganés, Pinto, Griñón o de San Lorenzo de El Escorial. En Madrid capital, se celebran tres verbenas en los barrios más castizos de la villa, como son:
San Cayetano (7 de agosto):
Se celebra en el barrio de La Latina / Embajadores y en las calles que tradicionalmente se coloca El Rastro. Es el patrón de los desempleados, por lo que los madrileños, intentan coger una flor de su carroza procesional para conseguir suerte en el empleo.
San Lorenzo (10 de agosto):
Esta fiesta ocupa las calles de Lavapiés. Se le representa con una parrilla, al ser martirizado en una de ella.
Virgen de la Paloma (15 de agosto):
La última y más popular, es la verbena de La Paloma. Se celebra entre la Gran Vía de San Francisco y la calle Toledo, cerca de la Puerta de Toledo. La virgen no es una talla, sino un cuadro, que según la historia fue encontrado por la madrileña Isabel Tintero y fue puesto en veneración en el portal de su casa hacia el año 1787. Cada 15 de agosto, el cuerpo de bomberos del Ayuntamiento (de la que es su patrona) descienden el cuadro del altar mayor.
Como no podía faltar en estas verbenas, hay diferentes puestos de comida donde se puede disfrutar de los entresijos y gallinejas, además de la típica limonada madrileña que suelen repartir diferentes asociaciones castizas. También se pueden ver grupos de chulapos y chulapas, y las calles adornadas con mantones y farolillos.
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