14 de enero de 2023

Las obras y reparaciones de la Iglesia en el siglo XIX

No hay siglo de que el templo parroquial de Fuenlabrada se libre de obras y reparaciones. En el siglo XVII, el templo adquiere el cuerpo tal lo conocemos hoy. En el siglo XVIII, se derrumba el campanario posiblemente ya inestable por el terremoto de Lisboa de 1755. Y en el siglo XIX no iba a ser menos.

El 14 de enero de 1846, el agrimensor y alarife Gervasio Montero, entrega al Ayuntamiento un documento describiendo los desperfectos en los que se encuentra la Iglesia de San Esteban y que según detalla "terminarán por causar su ruina si no se pone pronto remedio"

Al día  siguiente, el Ayuntamiento se reúne, se lee el informe y decide realizar una inspección ocular citando al párroco en la puerta del templo a las doce. Observados los deterioros, el mayordomo notifica que la ´fabrica no cuenta con recursos "... cuanto por no tener derechos la misma segun practica de este pueblo"

El 15 de marzo de 1856, se envía una instancia al cardenal arzobispo de Toledo para que influya a la reina Isabel II y costee la reparación de la Iglesia, ya que el Ayuntamiento se encontraba empeñado en las obras de la fuente de los Cuatro Caños y tiene escasos recursos. 

Unas semanas más tarde, el 9 de abril, se recibe contestación del secretario arzobispal, aconsejando al Ayuntamiento a que invite a los vecinos a contribuir en la obra de reparación del templo. El 17 de ese mismo mes, se recauda 1.378 reales en donativos. 

Meses más tarde, el 9 de octubre, el cura recibe un oficio notificando que se ha dado orden de que un arquitecto inspeccionará el templo y dará presupuesto. El Ayuntamiento debió de abonar 300 reales al arquitecto por la inspección y estancia en la villa mientras confecciona el presupuesto.

El 9 de enero de 1857, el arquitecto D. Francisco Enríquez Ferrer presenta un informe y el presupuesto detallado de las obras de reparación del templo, ascendiendo a 18.594 reales. 

En 1858, el 2 de enero, se recibe la autorización para iniciar los trabajos en la Iglesia. Por fin se da inicio el 4 de agosto, y el 1 de abril de 1859, la junta encargada de las obras presidida por el Alcalde, acuerda poner baldosas blancas de pavimento.


No hay comentarios:

Publicar un comentario